lunes, enero 05, 2009

El Papa advierte: Los padres son los principales educadores de sus hijos

Los padres son los primeros y principales educadores de sus hijos; en el terreno formativo “tienen una competencia fundamental: son educadores porque son padres”, escribe Benedicto XVI en su carta al cardenal secretario de Estado Tarcisio Bertone como legado pontificio para el VI Encuentro Mundial de las Familias (VI EMF), Ciudad de México, 14-18 de enero de 2009.

Marta Lago / Radio Vaticano - 04-01-09

VI Encuentro Mundial de las Familias, Ciudad de México, 14-18 de enero de 2009

Los progenitores son los primeros y principales educadores de sus hijos; en el terreno formativo “tienen una competencia fundamental: son educadores porque son padres”, escribe Benedicto XVI en su carta al cardenal secretario de Estado Tarcisio Bertone como legado pontificio para el VI Encuentro Mundial de las Familias (VI EMF), Ciudad de México, 14-18 de enero de 2009.

El diario de la Santa Sede “L’Osservatore Romano”, en su edición fechada este domingo, publica la misiva en latín, si bien el nombramiento del purpurado ya se había hecho público dos meses atrás. Acompañará al cardenal Bertone una misión formada por dos sacerdotes mexicanos: Rogelio Alcántara Mendoza –director espiritual del seminario hispano de Santa María de Guadalupe- y Martín Muñoz López –capellán del coro de la basílica de Nuestra Señora de Guadalupe-.

En su escrito al cardenal Bertone, Benedicto subraya también que “la familia está llamada a desarrollar su tarea educativa en la Iglesia, participando así en la vida y en la misión eclesial”.

Señala el ejemplo de cinco familias santas: Basilio y Emmelia –de Capadocia, siglo IV, testigos de la fe durante la persecución del emperador Galerio Máximo y padres de otros cuatro santos: los obispos Basilio Magno, Gregorio de Nisa, Pedro de Sebaste y Macrina, virgen-. Benedicto XVI cita a los santos Jordano y Silvia, quienes influyeron mucho en la educación de san Gregorio Magno, Papa.

Apunta igualmente el ejemplo de la beata María Teresa Ferragud Roig, quien tuvo cuatro hijas religiosas, todas asesinadas por odio a la fe durante la guerra civil española. María Teresa pidió morir en último lugar para alentar a sus hijas en su fidelidad a Cristo; todas perdonaron a sus asesinos.

En la carta de Benedicto XVI no faltan los testimonios del matrimonio santo Beltrame-Quattrocchi y de los beatos Luis Martin y Zelia Guerin, los padres de santa Teresa del Niño Jesús.

La gran cita en México será un altavoz de toda esta realidad con su lema: “La familia, formadora en los valores humanos y cristianos”.

El cardenal Ennio Antonelli, presidente del Pontificio Consejo para la Familia, apunta a los micrófonos de la emisora pontificia los objetivos del VI EMF. “Desde la perspectiva eclesial, objetivos de carácter espiritual -especifica-: favorecer la formación , la oración, la asunción de responsabilidades de las familias cristianas, también en el sentido misionero”.

Tras el reciente Sínodo de los obispos sobre la Palabra de Dios y, para América Latina, la gran asamblea de Aparecida (Brasil), cuyo tema era “discípulos y misioneros”, “la invitación es para que las familias cristianas se hagan más discípulas y más misioneras”, recalca el cardenal Antonelli.

Existe además una “perspectiva civil” del VI EMF: “Están invitados también muchos representantes de la política, por lo tanto de todo el mundo, y se busca precisamente favorecer una cultura, una sensibilidad política favorable a la familia, a la familia auténtica, fundada en el matrimonio, con vistas a la procreación y educación de los hijos”, explica el purpurado italiano.

“En muchos países un problema dramático es la caída demográfica -advierte-; se ha notado fuertemente este problema y quiere evidenciarse en el centro de la atención de todos”.

“Promover una toma de conciencia, en la pastoral, de que debe alentar a las famillas a que se conviertan en protagonistas de su desarrollo” es otra de las finalidades del inminente EMF. Para ello, el medio posible es la adhesión de las familias “a las asociaciones que tutelan sus derechos”. Y es que “una política favorable a las familias se puede lograr sólo si existen asociaciones fuertes y redes de asociaciones que saquen adelante, en el mundo, la causa de la familia”, concluye el cardenal Antonelli.

Web del VI Encuentro Mundial de las Familias: http://www.emf2009.com